Aquí va un pedazo de la mi historia de los últimos 5 años, el cómo llegué a Nepal y el porqué de una escuela de música, peor aun, de Jazz.
Llegué a Katmandú en 2005 gracias a uno de mis hermanos el cual me pidió ayuda con un negocio que tenía por aquellas tierras. Nosotros, mi chica y por aquel entonces una hija solo, salíamos de los EE.UU, donde vivimos 10 años, y se nos ocurrió que con el dinero que habíamos ahorrado nos podíamos dar el lujo de viajar por Asia durante un añito. nepal no estaba en el mapa pero aceptamos la oferta de mi hermano. Al poco de llegar, el festival de jazz de Katmandú me ofreció tocar allí y acepté. Después de este comienzo empecé a tener varios alumnos privados y estos varios se convirtieron en mucho, entonces decidí que no estaría mal abrir una escuela de música allí, ya que todas las que había visto les faltaba mucho para poder ser denominadas escuelas, simplemente porque los educadores de las mismas nunca habían tenido la oportunidad de salir de Nepal. Me sentí un privilegiado, nunca pagué por mis estudios en los EE.UU ya que siempre me dieron becas, eso sí, me lo curré muchísimo. El caso es que le comenté mis intenciones a un colega Nepalés que tocaba el bajo y me dijo que se apuntaba...buen rollo, ya somos dos colgaos! Después de diseñar la escuela y elegir el sitio (un edificio de la familia de mi nuevo socio), se empezaron a erguir las paredes y todo aquello empezó a tener forma. me dediqué a preparar un curriculum y a buscar a posibles profesores, los cuales tendrían que ser entrenados. Se me ocurrió que lo mejor sería empezar a traer profesores extranjeros para que estos dieran clases y ayudaran a entrenar a futuros profes nepaleses, y así fue. En estos cinco años de vida de la escuela hemos tenido muchos profesores extranjeros de muchas nacionalidades: Curaçao, EE.UU., Brasil, México, España, Japón, Holanda, Korea, India, Noruega, Dinamarca, Alemania, Australia, Francia, Italia, Bélgica, y algunos que seguro se me olvidan. Nunca creí que tratar con tantas ciudadanos de diferentes países fuese tan difícil. Difícil porque tienes que descubrir cómo trabaja cada uno de ellos, su cultura y encima entender su frustración al llegar a Nepal, un país fuera de este mundo, donde todo es muchísimo más complicado de lo que te puedas imaginar.